Señor Dios Padre Todopoderoso y Omnipotente. Alabado seas. Bendito seas Padre Amado. Rey Celestial, vengo a Ti hoy Señor para pedirte fuerzas. Necesito de ti, Padre. Necesito de tu energía y poder en mí pues siento que sin ellos no puedo continuar. Mi cuerpo, mente y corazón se están debilitando, Dios mío. Ayúdame; te lo imploro. En estos momentos me arrodillo ante ti para suplicarte que me sostengas con tu mano y no me dejes caer. Dame fuerzas, Señor. Dame fuerzas ahora.
Envía a mi lado cientos de ángeles que me sostengan y me den la voluntad y el control para no dejarme llevar por mis debilidades humanas. Te pido en este mismo instante Señor que un rayo de luz llegue sobre mí y me cubra completamente, y que esa luz sea la energía que proviene de ti con fortaleza y amor propio.
Confío en tu poder infinito Señor. Sé que me has escuchado y que desde ya mi alma recibirá tu fuerza y voluntad. Amado Dios, te doy gracias y te alabo hoy y siempre. Amén.