En algún momento de nuestra vida todos hemos sentido miedo…
Es normal. Sentir miedo forma parte de ser humanos.
Existen muchos miedos: miedo a no alcanzar los sueños, miedo al desamor, miedo a la carencia, miedo a la enfermedad, etc.
Por lo general, cada persona puede llegar a tener una inclinación mayor a sentir más miedo sobre un tema más que sobre otro. Esto también es normal sentirlo.
No obstante, cuando el miedo se comienza a apoderar de manera constante de nuestra vida y comienza a afectar otros aspectos e incluso a enfermarnos, ya estamos hablando de algo más complejo.
¿Cómo vencer el miedo? ¿Cómo controlar esta emoción de manera que no se apodere de tu vida?
Aquí te compartiré algunos tips muy útiles que Dios y los angelitos me han enseñado a lo largo de los años.
Como siempre lo menciono, yo los he practicado en mi propia vida y te puedo asegurar que funcionan 😇.
- No evadas la emoción. Aunque sentir miedo no es agradable, es una manera en que tu ser te está diciendo que algo no está funcionando bien o que hay algo que no te conviene. Por ello, es importante prestarle atención y confrontarlo de manera consciente. No lo evadas. Esto solo hará que se mantenga por más tiempo contigo.
- Luego de reconocer que tienes miedo (aunque suene demasiado lógico, créeme, sucede en muchos casos que se siente miedo pero no se tiene la concientización de la emoción. Son dos cosas diferentes) el siguiente paso es identificar cuál es su causa.
Lo más importante en este paso es que identifiques si esa causa es real o no.
¿A qué me refiero?
A que en muchas ocasiones sentimos miedo por algo que creemos o pensamos que existe, pero en realidad no es así.
Por eso es fundamental que hagas este paso y te detengas en él el tiempo que sea necesario hasta que tengas una respuesta clara.
Te lo explico con un ejemplo: digamos que estás en una relación y hasta ahora ha sido bonita y estable. Sin embargo, si tu pareja por alguna razón se demora en llamarte más de lo normal, comienzas a pensar que quizás está con alguien y te está siendo infiel. Comienzas a sentir un miedo terrible porque piensas que te está engañando y te va a dejar por alguien más.
Luego, cuando te llama, te cuenta que no pudo hacerlo antes porque su mamá se sintió mal de salud y tuvo que llamar a los paramédicos para que la atendieran.
Este, como ves, fue un miedo creado por tu mente, no un miedo real.
Es vital que identifiques la fuente de ese miedo y si es algo que realmente existe o por el contrario ha sido producto de pensamientos que has tenido y lo han alimentado.
Si deseas aprender más sobre cómo identificar las emociones que nos bloquean en nuestras relaciones interpersonales, en mi libro ¿Por Qué no Fluye el Amor en mi Vida? explico en detalle cómo eliminarlas.
- Enfócate en lo que quieres y no en lo que no tienes. Esta es una de las enseñanzas más valiosas que he recibido de parte de Dios y los angelitos. ¡Es mágico cómo funciona! Te lo explico en un paso a paso para que sea más sencillo:
- Comienzo a sentir miedo por un pensamiento negativo que surgió en mi mente.
- Lo reconozco e identifico.
- En ese momento, empiezo a respirar lento y profundo varias veces para ayudarme a sentirme de nuevo relajada y no volverme un manojo de nervios. Entre más nerviosa, menos capaz voy a ser de pensar claramente, así que respiro de esa manera para poder controlar la emoción negativa que me quiere invadir.
- Luego, en lugar de continuar pensando en ese escenario pesimista y negativo que está alimentando mi miedo, comienzo a enfocarme en cómo quiero realmente que esa situación sea.
- Al cambiar la manera de ver lo que está pasando, al pensar en lo que quiero que se dé y ayudada por la respiración, comienzo a sentir la energía diferente en mi cuerpo y en mi ser; me siento más calmada.
- Me enfoco en la solución. Al tener más calma y sentirme más tranquila gracias a que comienzo a pensar en lo que realmente deseo, me concentro en los pasos que debo tomar para que eso se dé.
- En otras palabras, ocupo mi mente y mis pensamientos en algo constructivo y benéfico para mí y no en algo destructivo y contraproducente para mi vida y mi tranquilidad.
Artículo relacionado: Cómo controlar los pensamientos negativos en momentos de crisis.
- Ora y medita para pedir guía y dirección. Siempre pido a Dios y los ángeles que me muestren y confirmen si lo que pienso es lo más conveniente para la situación en general y para mí, así que destino un tiempo para pedirles por esa guía. Por lo tanto, mi gran consejo para ti es que hagas lo mismo y te conectes con ellos. Como siempre te lo he recomendado: escribe todo lo que sientas, veas o percibas, pues aunque quizás no tenga sentido para ti en el momento, más adelante lo tendrá. Te lo prometo.
Si deseas profundizar en aprender cómo orar para recibir la respuesta de Dios y cómo entenderla, te invito a leer mi libro ¿Por Qué Pido y No Recibo?.
- Toma acción. No basta con pensar en lo que quieres alcanzar. Si de verdad quieres que las cosas se den como deseas y no como las estás pensando cuando las imaginas de manera negativa, es fundamental que tomes acción. Algo que definitivamente me ha ayudado para cometer menos errores, es confiar en mi intuición y dejarme guiar por lo que Dios y mis angelitos me muestran. Básate en lo que hayas recibido de parte de ellos y actúa con fe.
Cuando el miedo es causado por las acciones de otras personas.
Si el miedo que sientes no es generado por tu propia mente sino por las acciones (reales) que alguien más está realizando, los pasos que te he compartido son iguales. No obstante, existe una gran diferencia y es que en este caso hay que considerar el libre albedrío de la otra persona. Esto no lo puedes ni debes tratar de manejar o controlar. Incluso, si lo intentaras, lo forzado no funciona.
En este caso, la recomendación es la siguiente:
- Determina las acciones que puedes realizar de parte tuya para mejorar la situación. Recuerda, esto es sin tratar de convencer al otro que haga o diga lo que tú quieres pues no te va a funcionar.
- Lleva a cabo esas acciones para aportar a que las cosas mejoren.
- Continúa enfocando tu mente y tus pensamientos en lo que deseas ver manifestado en la situación. Nunca olvides que uno atrae lo que piensa, ¡así que es fundamental que alimentes tu futuro con cosas positivas y no con lo que en realidad no quieres que se dé!
Las anteriores son recomendaciones generales pues, como lo mencioné al inicio, cada situación es particular y única y existen muchos tipos de miedos.
Sin embargo, si te calmas y te enfocas en lo que quieres, vas a ayudarte muchísimo para evitar que el miedo que sientas siga creciendo como una bola de nieve y llegue el momento en que se te salga de las manos.
Aquí te comparto un PDF descargable para que lo utilices al hacer el ejercicio de identificar tus miedos.
Un último consejo que es súper poderoso.
Dios y los angelitos me enseñaron esta frase que uso como un mantra de paz y tranquilidad cada vez que el miedo me ataca:
“Dios está conmigo, Dios está en mi.
Dios está conmigo, Dios está en mi.
Dios está conmigo, Dios está en mi”.
Lo repito así, tres veces seguidas e inmediatamente comienzo a sentir un aliento de tranquilidad en mi interior.
Lo más importante es que lo digas con mucha fe.
Descarga el PDF con los pasos a realizar para la identificación de tus miedos.
Cuéntame: ¿A qué tienes miedo? ¿Logras identificar su causa o raíz? ¿Cómo lo manejas cuando se presenta? Leo tus comentarios.
Hola Anita eres una mujer increíble y maravillosa,todas tus palabras llegan en el momento justo, un abrazo fuerte desde el corazón, mil gracias